Misma Lucha

         

        Tras leer el tuit tan desafortunado de twitter de @canichones( tuit )Tras sufrir el dolor tan grnade durante un primer momento, creemos que fue un error de ignorancia y por mas que nos rompa el corazon no queremos desvirtualizar el mensaje de la protectora por que nosotras mismas hemos estado y estamos en ese lado. Todos y todas cometemos errores, pero la mejor respuesta siempre es regalar afecto.

        Las integrantes de Activismo Autista hemos formado y formamos parte activa de movimientos animalistas y lucha por los derechos de los animales, y personalmente nos atrevemos a decir que nuestra lucha en ese ámbito fue aún más férrea si cabe que la llevamos entre manos ahora.

        Las injusticias y el maltrato animal nos trasladaron el corazón a la boca, a los ojos, a las manos y pies.

        A la boca para gritar bien alto por su bienestar moviendo muchas manifestaciones y reuniones con instituciones públicas.

        A los ojos para observar el estado de un animal y saber lo que había detrás, y que nunca era una buena situación.

        A las manos para limpiar y habilitar los cheniles de las Protectoras y Refugios de Animales a cualquier hora y con cualquier climatología, y para dar muchas caricias de bienvenida y de adiós cuando el rescate era infructuoso.

        A los pies para darnos una velocidad sobrehumana y acudir fuera cual fuera la hora del día a una cuneta a rescatar un animal atropellado, a correr para buscar financiación para el mantenimiento de las instalaciones y gastos veterinarios, y acercar a los animales a sus nuevos hogares.

        La vida nos colocó una maternidad similar, en la que tenemos que seguir peleando para cuidar de nuestros cachorros Autistas, unos cachorros que llegaron después de haber ocupado la casa con animales rescatados y a día de hoy comparten espacio, porque TODAS ofrecimos un hogar a animales que un día le sobraron a algún o alguna desalmada que echó a patadas ( en el mejor de los casos) a estos seres vivos de su lado.

        Nuestro respeto y agradecimiento máximo a todas y cada una de las Protectoras y Refugios que se dedican a esta ardua labor tan abandonada a nivel institucional, ofreciendo su voluntariado, regalando amor y cariño a unos seres vivos que padecen la inquina más criminal de los humanos.